¡PARCELAS DE AGRADO!,
PONGAMOS ATENCIÓN
Yuri Rojas, ingeniero agrónomo, CORTESA
Marzo, 2023
En el último tiempo, han aparecido innumerables notas de prensa sobre las parcelas de agrado, debido principalmente a la posibilidad que se haga valer, por parte de las autoridades del sector, la reglamentación vigente sobre este aspecto.
Desde hace algunos años, la cantidad de parcelas de agrado puestas a la venta en nuestro país, ha aumentado de manera considerable, numerosos predios con un buen suelo para uso agrícola se han dividido en pequeñas parcelas de 5000 metros cuadrados, es decir 0,5 ha. Hoy se ofrecen a la venta parcelas de esa superficie en Chiloé, Puerto Varas, Puerto Montt y otros sectores con financiamiento a 12 años. En los diarios de circulación nacional y en sitios de Internet, se publicitan profusamente estos predios con facilidades de pago, lo que ha permitido que numerosas familias se trasladen a vivir fuera de Santiago, principalmente en el sur del país, en abstracto se ve como algo inofensivo, una vida alejada del mundanal ruido, con aire puro, bonitos paisajes y una mejor calidad de vida, pero el daño que se está produciendo a los sectores rurales en donde se emplazan estos predios es enorme. A muchos les permitió tener una segunda vivienda en un entorno más natural y a otros le significo trasladarse a una primera vivienda en un sector rural.
En el año 1980 se dictó el Decreto Ley 3516 del Ministerio de Agricultura que estableció normas para la subdivisión de predios rurales, de manera que aquellos terrenos de uso agrícola, ganadero o forestal pudiesen ser subdivididos de forma libre y comercializarse en predios de hasta 0,5 hectáreas, pero manteniéndose el destino del predio primitivo, lo que hasta esa fecha no era posible para los propietarios de grandes terrenos, pues estaba prohibido constitucionalmente. Hoy esta práctica es muy común, se dividen predios agrícolas valiéndose de subterfugios legales, en los cuales se menciona que serán terrenos para ser usados en actividades agrícolas, cuando se sabe con certeza, que en una superficie de 5000 metros. no es posible desarrollar una actividad agrícola rentable, ya que se tendría que usar una avanzada tecnología al estilo de lo que se hace en Países Bajos, Israel u otros países pequeños y con poco suelo agrícola disponible, de tal manera que se engaña con esta mala práctica. A pesar que se pretende normar este gran negocio, aún se sigue publicitando la venta de estas parcelas de agrado y tomando en cuenta que se disminuirá la oferta subirán los precios de estos predios y se especulará aún más. No son pocos aquellos que han salido a defender este negocio, con el argumento que se atenta con la libertad de cada uno a vivir en el lugar que cada persona lo desee, claro que no se hace mención, del deterioro que se produce en el entorno en donde están emplazadas esos terrenos y de los cuales pasan a ser en la práctica terrenos urbanos en los que muchas veces se construyen más de una casa.
Además esto ha redundado en el deterioro de los sistemas agroproductivos, los sectores rurales se han visto sometidos a una presión, se ha producido una sobrepoblación de sectores rurales, y cada vez se requerirá una disposición de mayor cantidad de agua potable, ya que en estas parcelas es común observar, un gran jardín con abundante césped, una piscina, surgiendo la interrogante: ¿cómo resolver la demanda de este cada vez más escaso recurso?, y también se necesitará establecer sistemas eficientes de recolección de basuras y residuos domiciliarios. En el sur de nuestro país, en los alrededores del Lago Llanquihue se ha reducido notablemente el bosque nativo, están en peligro los humedales, en Puerto Varas la congestión vehícular es enorme en épocas estivales, los problemas de las grandes ciudades se han trasladado a lugares en los que por paradoja se busca la tranquilidad. La isla grande de Chiloé es la que ha visto un aumento considerable en la instalación de parcelas de agrado, disminución del bosque nativo, perdida de la biodiversidad, con la llegada de mascotas están en peligro la fauna propia de de esos sectores. Muchos que ya tienen una parcela de este tipo defienden su posición argumentando que producen hortalizas, huevos, fruta y otros productos, pero lamentablemente estos son solo para autoconsumo y no pasan a integrar el sector productivo silvoagropecuario, al que acceden los grandes sectores de consumidores.
La Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), también ha mostrado su preocupación en relación a la subdivisión de tierras agrícolas para parcelas, que posteriormente son usadas para proyectos inmobiliarios, con fines de primera o segunda vivienda.
En el diario “La Tribuna” de la provincia de Biobío de edición del 16 de febrero de 2023, manifestaron al diario, a través del Departamento de Comunicaciones de la SNA, que son un gremio representativo de las actividades productivas realizadas en predios destinados a cultivos, para agroalimentos u otras especies que sirvan de insumo para la industria de la cadena alimentaria.
Comentaron que el 31 de enero 2023, la SNA se reunió con el ministro de Agricultura para seguir avanzando en una propuesta sobre parcelaciones agrícolas. La SNA declaró que como gremio, en relación a parcelaciones en sectores rurales con fines habitacionales, tiene la esperanza “que se resguarde el derecho de propiedad del dueño del predio y asimismo, no se afecte la capacidad productiva de suelos agrícolas”, también mencionaron otro de los problemas, el re- poblamiento de sectores rurales y de trabajo en esas zonas, ha generado: el choque de la población que habita en los campos y aquella que trabaja en ellos. Indicaron también que “es importante generar una adecuada convivencia entre las parcelas y la operación agrícola”, debe considerarse la administración de los recursos naturales disponibles, en las zonas donde el agua es el recurso que no sobra y está cada vez más escaso según lo expresado por la SNA, dificultando la prestación de servicios básicos a la población que ha migrado de la ciudad al campo.
El gremio también criticó el mal uso de predios rústicos para su venta o usufructo a través de venta a terceros, que quisieran hacer uso de estos suelos con fines habitacionales. La Sociedad Nacional de Agricultura mencionó su “total rechazo y petición de fiscalización oportuna, respecto de los denominados «loteos brujos’”.
De igual manera coincide con la postura del gobierno, ya que en una publicación aparecida en la página electrónica del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) , dependiente del Ministerio de Agricultura, en el mes de julio de 2022, establece regulaciones para las parcelas de agrado, la autoridad instruyó al (SAG) la suspensión de la certificación de predios rústicos que pudieran significar una amenaza a los sistemas agroproductivos, al ecosistema y al equilibrio socio-ecológico de las localidades en las que están emplazados, ya que en los últimos años han proliferado numerosos loteos en áreas rurales, que vulneran la normativa vigente simulando que estos predios continúan su uso agrícola, valiéndose de un resquicio legal, se han dividido terrenos como que fueran a darle un uso agrícola, pero en la realidad se les ha dado un uso habitacional, con las parcelas de agrado, disminuyendo considerablemente la tierra para este fin. A partir de lo mencionado, el Ministerio de Agricultura decidió tomar medidas de carácter urgente y efectivo. De esta manera que junto al Ministerio de Vivienda y Urbanismo, realizaron un detallado análisis de la normativa que está vigente, con el objeto de determinar el real sentido de esta y su correcta aplicación. Por tanto, con el propósito de preservar el suelo rural para fines agrícolas y de evitar los efectos de un desarrollo inmobiliario desmedido y al margen de la normativa vigente y de la planificación territorial, es que el ministro de agricultura ha instruido al SAG, suspender todo tramite de solicitud de certificación de subdivisión de predios rústicos en aquellos casos en que el proyecto pueda significar un eventual cambio de destino de los lotes que han resultado, hacia los que no son permitidos por la normativa. Es de esperar que con esto se desincentive la presentación de nuevos proyectos, que no están permitidos por la normativa vigente. Lo que manifiesta el Ministerio de Agricultura como así el Ministerio de Vivienda y Urbanismo, es poner término a la proliferación de proyectos con fines inmobiliarios.
Tomando en cuenta esto y sabiendo que Chile a diferencia de nuestros vecinos, no posee una gran superficie para uso agrícola, se debe detenerse este negocio, en unos pocos años más habremos perdido una gran superficie de buen suelo agrícola, como lo menciona CIPER ya en comunas como Talagante o Padre Hurtado, la perdida de terrenos agrícolas es del orden del 10%. La presión sobre determinadas áreas, alguna con poca vegetación y un entorno semi-desértico como lo es el sector de Chicureo, se hace patente sobre la escasa disponibilidad del recurso hídrico, ya conocemos el lamentable final de la laguna de Aculeo. Esto se repite en muchos lugares rurales, por eso hace bien el Ministerio de Agricultura a través del SAG, de limitar la proliferación de estas mal llamadas “Parcelas de Agrado”.
Visité una parcela de agrado en los alrededores de Puerto Montt hace dos meses atrás, a diferencia de otras en que se han y talado bosques nativos, en esta oportunidad la parcela conservó toda la vegetación existente y la casa habitación se adaptó al bosque existente, pero es un caso poco común, cuando lo que siempre se hace es eliminar bosques, si existiera, e instalar la casa habitación en un lugar que no se adapta a los requerimientos de una persona que siempre ha vivido en grandes urbes.
Lo primero que encuentran los propietarios de estos predios, cuando les son entregados es una abundante vegetación y en muchas oportunidades tupidos bosques, cualquiera pensaría que la casa habitación será emplazada entre esta vegetación, pero no es así, se comienza con el desbroce y la tala de árboles, cambiando de un momento a otro el entorno, desde ese instante cambia completamente el paisaje, entra la retroexcavadoras o palas mecánicas y ya, la suerte está echada para el que alguna vez fue un idílico paisaje, se construye una casa con diseños de ciudades y se produce un “sin retorno” cambio del sector rural.
Aún es tiempo de detener el deterioro de nuestros campos y bosques, de lo contrario habremos perdido una gran superficie de buenos suelos y seguiremos dependiendo de la cada vez más abundante importación de alimentos.